"La corrupción pareciera no importarle a la clase política"

El profesional señaló que vimos al presidente inaugurar la asamblea legislativa y así “de manera marginal mencionó el tema de Rosario y la corrupción”. También señaló que la única vez que aludió a la palabra corrupción fue cuando dijo que “cuando él se vaya no podrán acusarlo de corrupción”, como diferenciándose del resto del gobierno.

En ningún caso habló de "por qué Argentina volvió a ser aplazada a fines de enero en el ranking internacional de transparencia": un estancamiento, un aplazo, “contexto de anomia, de luchas internas del poder; la corrupción pareciera no importarle a la clase política en general”.

“La Argentina surfea en una situación de faltas de control, de indiferencias en los controles, de corrupción latente porque no se está controlando (…)”. Hay muchas luchas internas de los dos lados de la grieta, “sin ideas claras de qué van a hacer con la Argentina”, afirmó.

ARGENTINA DEL SIMULACRO

Es la que parece estar haciendo y no hace nada. El analista explicó que esto tiene que ver con la inflación que continúa, la ausencia de moneda, la falta de educación, la pobreza, la lucha contra la corrupción, “estos fallos que vamos conociendo sobre los fundamentos de la condena a la vicepresidenta”, que, para el especialista “deja muchas dudas en el tema probatorio”. Muchos simulacros para tratar de mostrarles a los argentinos “que se está haciendo algo, cuando no se hace nada”.

1600 PÁGINAS DE CONDENA A CFK

“Qué difícil es para el ciudadano común acceder a 1600 páginas de un fallo que debe ser interpretado por otro; la ciudadanía debería saber cuáles son las pruebas que hay contra la vicepresidenta”, explicó.

También aquí existe una falencia, porque “el ciudadano tiene que conocer si efectivamente los cargos fueron demostrados (…); la justicia investiga mal, a destiempo, se formalizan condenas con escaso valor probatorio”, señala.

“Lo que reina en la argentina es la impunidad”. La Argentina, si pretende frenar la corrupción tiene que tener organismos de control, que no los tiene”, reclama.

También referenció que una de las cosas inentendibles es por qué exoneran a Julio De Vido y a los demás funcionarios, si todos firmaron los decretos, “cómo puede ser que no estén condenados”, indica”.