"El mejor amor laboral que tuve fue la radio, sin ninguna duda"

Hay voces inconfundibles dentro de los medios de comunicación en Argentina. Y sin lugar a dudas, dentro de ese grupo privilegiado donde unos pocos lograron ingresar, se encuentra Silvio Soldán. Hoy, ya con 85 años pero con el mismo espíritu que lo caracterizó durante toda su carrera profesional y personal, se prestó a dialogar con Radio Sudamericana y dejar unos cuantos conceptos muy interesantes acerca de la radiofonía argentina, sobre sus efectos en la sociedad y de lo que significa para nuestra cultura. A continuación, la excelente nota.

No puedo no viajar unos años atrás y no recordarlo a usted con programas como “Feliz domingo para la familia” en la televisión. Pero hoy vamos a hablar de la radio y de lo especial que es este primer centenario de este medio de comunicación tan especial.

Silvio Soldán: Y estos medios de comunicación tan importantes como la radio, la televisión, etc, son realmente hermosos, ¿no? Y hablar de la radio es fantástico porque se trata de uno de los grandes inventos de la humanidad. Mirá que se han hecho cosas y se han superado los medios de comunicación con la Internet y todo lo que se te ocurra en muy poco tiempo. Porque vos fíjate que la radio nace hace 100 años en Argentina, y 100 años en la vida del ser humano no es nada, es un momentito. Y sin embargo, en ese tiempo han pasado tantas cosas y la radio sigue permaneciendo como un elemento fundamental para la vida del ser humano. Y es que es cierto a pesar de que suene como una exageración, el ser humano necesita a la radio: ella acompaña, está con vos, te quiere, te informa, te ilustra. Cuando se inventó la TV me acuerdo que muchos decían que la radio se acababa, y no solo no se acabó, sino que se incrementó aún más. Hoy lo ratings no son tan grandes por la variedad que existe para comunicarse, para estar y para enterarse. Antes habían 4 canales de televisión y hoy tenemos docenas de ellos. Antes en Buenos Aires habían pocas radios y hoy tenemos centenares de ellas. Por lo que podemos decir que las personas tienen muchas más opciones, las cuales todas son válidas y necesarias para la gente. ¡Es tan hermoso todo esto!

Hay mucha gente que está iniciando esto. Acá en Corrientes hay facultad de Periodismo, carreras de locución, etc. Digo, ¿qué es lo que hay que tener frente al micrófono cuando se enciende el cartel de “Aire” y uno comienza a ser parte de este mundo maravilloso que es la radio?

Silvio Soldán:Es una pregunta difícil de responder sinceramente. Porque todo depende de cómo es uno, de cómo está formado. Lo primero que hay que hacer es ser respetuoso por el oyente, porque siempre al oyente se lo debe respetar. A mí no me vengan a decir que “los jóvenes son distintos” porque no es así. Después, otra cosa que no entiendo es cuando dicen “termina el horario de protección al menor”. El menor, y el oyente en general, debe estar protegido siempre, porque el buen gusto no debe terminarse nunca. Por lo tanto, lo fundamental es ser respetuoso por el oyente y también, ser honesto con él. No hay que mentirle a la persona que te escucha, y es fundamental para una persona que se pone frente a este aparatito. Y es que antes no existían escuelas de Periodismo o Locución, sino que teníamos que aprender con la nuestra. Hoy en día el camino está mucho más allanado con todos los elementos que te nutren para estar practicando esta tarea tan noble de estar frente a un micrófono.

Usted que hizo televisión por muchos años y también radio, ¿qué encontró en la radio que no encontró en ningún otro lugar? ¿Es la cercanía con la gente? ¿Es todo lo que la radio te da sin pedir nada a cambio?

Silvio Soldán: Y mirá, a mí la televisión me dio conocimientos, éxito, fama, dinero, etc. Y la radio me dio mucho menos en comparación a pesar que tuve varios éxitos en ese medio. Pero por ejemplo, Argentores sacó un libro, y te lo digo porque escribo ahí y soy socio también, sobre los 100 años de la radio en donde todos los que estuvimos vinculados a la radio de alguna manera dimos nuestra opinión. Y en la página en la que estuve yo terminé diciendo que, a pesar de todos los amores que tuve en la vida, para mí el mejor amor laboral que tuve fue la radio, sin ninguna duda. ¡Aguante la radio!