"El padre les arruinó la vida a mis hijas, viven encerradas y él libre"

Dramático fue el relato de Verónica, mamá de tres niñas que, tras la confesión de dos de sus hijas descubrió que estas eran víctimas de vejaciones y abuso sexual por parte de  su propio padre durante años. “El mes que viene va a ser un año del abuso de las tres hijas que tenemos en común”, lamentó la mujer apuntando contra Gustavo, su ex pareja.

Respecto a cómo pudo enterarse de la aberrante verdad,  recordó lo que sucedía hace un año “Mi hija del medio me contó con detalles que el papá había abusado de ella e hicimos la primer denuncia”.  “Luego de separarnos, teníamos un régimen de visita con el padre. Como él trabajaba en la semana,  las nenas los fines de semana se iban con él. Llorando me contaron lo que pasaba porque no daba para más y tenían mucho miedo”, prosiguió.

La primera denuncia fue radicada en el Juzgado de Instrucción Nº 2 a cargo de la Dra. María Agostina Falcione; y la segunda, fue en el mes de diciembre pasado, luego de la mayor de las tres menores se decidiera a relatar lo que guardaba desde hace años. Esta vez la denuncia fue asentada en el Juzgado de Instrucción Nº 5 a cargo de la Dra. Laura Varela. “Viven encerrada por temor al papá, tienen terror de salir”, expresó.

“Mi hija de 13 años tuvo dos intentos de suicido. A otra la estaban por medicar para dormir por que en cinco meses no podía conciliar el sueño; les arruinó la vida a las tres”, aseguró explicando que a pesar de las dos denuncias, el supuesto  agresor sexual nunca fue detenido, “y hasta el día de hoy no han tenido respuestas”.

A pesar de todo lo que vivieron, la contención psicológica que recibieron durante meses en el Hospital Pediátrico Juan Pablo II les devolvió en parte la motivación por jugar, reír, pero “el 27 de julio pasado fue la última vez que tuvieron la sesión con su psicóloga y de ahí se quedaron sin nada”. El hospital público les suspendió la atención dado que supuestamente cuentan con obra social, es decir están dentro de la cobertura del padre, pero ellas no se benefician de esta. Por lo que Victoria pide a la Justicia le restituya la atención psicológica a sus hijas a la que describe como indispensable para ellas.

Las niñas fueron sometidas a pericias psicológicas en las diferentes instancias del proceso que establece la Justicia, iniciando por el cuerpo de Psicología Forense. “Del Juzgado de Menores nos llamaron y pasaron por una pericia psicológica y psiquiátrica. Todas las psicólogas me dijeron que fueron años de abusos los que aguantaron mis hijas”, señaló.

“Mi pedido es de justicia, que le den a mis hijas la posibilidad de salir a la calle libremente, dado que por temor no salen porque él vive a 8 cuadras de mi casa; pido que le devuelvan la niñez a mis hijas de salir a jugar a la plaza sin miedo y el tratamiento psicológico para que puedan seguir adelante”, expresó.