Argentina cedió su lugar a Uruguay como exportador de carne a China

Las restricciones impuestas por el gobierno relegaron al país en la tabla de proveedores de carne a China. El año pasado ocupaba el segundo lugar que ahora quedó para Uruguay. Desde el 20 de mayo, fecha en que se anunciaron las restricciones a la exportación de carne, el país perdió de vender a China unas 20.000 toneladas menos por mes, que equivalen a unos 100 millones de dólares mensuales. 

Entre junio y septiembre de este año las exportaciones argentinas de carne bajaron 16,5% en relación con el período enero a mayo de 2021.Del mismo modo, el cepo benefició a nuestros vecinos. Brasil logró aumentar sus ventas un 41,6%, Uruguay, el 22,9% y Estados Unidos, un 6,2%.

El año pasado Argentina abastecía a China con el 23% de carne y ocupaba el segundo exportador como proveedor. En septiembre de 2021 bajó al tercer lugar con el 11% y su puesto fue ocupado por Uruguay que hasta 2020 vendía el 11% y ahora lo hace por el 14%.

Juan Manuel Garzón, economista del Ieral de la Fundación Mediterránea, analizó los factores que podrían haber influido en la caída de las exportaciones de carne. Si se observan los números externos y el crecimiento de las ventas de otros países se descarta una retracción en la demanda china, entonces hay que considerar los factores internos.

Los últimos cuatro años los volúmenes de carne que se comercializaban tenían un crecimiento sostenido, pero en junio se frenaron.  Se empezaron a limitar los volúmenes pasando de un esquema de libre comercio a un comercio regulado y administrado por el Gobierno.

Actualmente se exportan entre 65.000/70.000 toneladas de carcaza y deberíamos estar vendiendo 95.000/100.000 toneladas. Deberíamos estar en un 20% más que el año pasado. Lo que perdimos lo ganó Uruguay, Brasil y hasta Estados Unidos.

Según Garzón, al riesgo de mercado que tienen todos los negocios se le sumó el riesgo institucional. Ya no quedan países desarrollados en el mundo con este tipo de riesgo, salvo los ex países de la Unión Soviética, algún país africano o asiático.

Estas medidas desalientan la inversión y el crecimiento. La falta de políticas a largo plazo es un eterno avance y retroceso. Para el economista no hay muchas perspectivas en que el Gobierno libere totalmente las exportaciones en diciembre. Los precios se mantendrán tensionados en los próximos dos meses. El Gobierno va a tener el dilema de conseguir dólares de exportación y mantener estables los precios de la carne.