La bajante sigue en estado crítico y anticipan un futuro desfavorable

Luego de dos años consecutivos, las estimaciones de la bajante del río Paraná no prevén que se revierta la situación en un corto plazo. En las cuencas de aporte del río Paraná en territorio argentino, las lluvias fueron moderadas y los niveles continuarán netamente en aguas bajas.

El último informe del Instituto Nacional del Agua (INA) destacó que el área con mayores precipitaciones de la semana pasada coincide en gran parte con la región de respuesta rápida de la cuenca del Plata. “Esto tendrá un efecto brusco especialmente sobre el río Uruguay y, en menor medida, sobre el Paraná”, señalaron.

Por otra parte, las lluvias que se registraron y pronosticaron dan lugar a una mejora de corto plazo, pero no se prevé que sea persistente. “En Corrientes y Barranqueras las alturas hidrométricas de marzo cerrarán con un promedio de casi tres metros por debajo de los valores medios (1995-2021) y más de un metro por debajo de marzo de 2021, cuando la bajante ya estaba instalada”, señalaron desde INA.

Al mismo tiempo, el análisis de la Oficina de Riesgo Agropecuario comentó que la confluencia Paraná-Paraguay se halla en condiciones de “bajante severa”. En este sentido, aclararon: “Es muy probable que se mantenga así en los próximos meses, recuperándose gradualmente”.