Sicario en moto brasileña acribilló a comerciante en Misiones

De repente, en plena mañana del viernes 23 de septiembre, una ráfaga de disparos de alto calibre rompió la rutina, pero al mismo tiempo confirmó una inquietante y horrible tendencia en la frontera seca de Bernardo de Irigoyen: algunos conflictos ahora se resuelven con sicarios y muerte. 

La víctima en este caso fue Sebastian “Chany” Fernández Da Rosa (42), un empresario y comerciante de la localidad que dejó una mujer e hijo. En la frontera lo describen como un hombre fuerte, peso pesado y respetado por sus negocios ajenos a la ley, con muchos vínculos y de poder adquisitivo muy grande.

Se trata del tercer hombre que muere en estas circunstancias en los últimos 16 meses, luego de los homicidios de  Juan María López (50) y Rafael Antúnez de Olivera (45).

Los investigadores detuvieron a un sospechoso, que permanecía detenido e incomunicado, aunque por el momento la única vinculación es el señalamiento de un testigo de la escena.

El hecho ocurrió cerca de las 9.30 de la mañana en un depósito de mercadería ubicado en el límite con Brasil, sobre la avenida Tránsito Pesado, en su intersección con Saltos del Moconá.

Ahí Chany tenía un galpón de mercaderías, muy cerca del ingreso al centro de frontera conocido como Aduana de Cargas. Tránsito Pesado termina en el paso internacional habilitado por donde no paran de circular vehículos y vecinos de las localidades de ambas márgenes todos los días, al final de la cuadra donde se concentra la mayor cantidad de negocios de Irigoyen.

Al parecer la víctima estaba recostada sobre una camioneta cuando el asesino llegó en su motocicleta y lo acribilló para luego darse a la fuga con destino desconocido, aunque se cree huyó a Brasil. El médico policial determinó luego que Chany tenía siete disparos de arma de fuego.

Los presentes llegaron a subirlo a un vehículo y llevarlo al hospital de la localidad, pero desafortunadamente nada se pudo hacer para salvarle la vida. Las autoridades del Juzgado de Instrucción Uno de San Pedro, a cargo del juez Ariel Belda Palomar, que intervienen en el caso, ordenaron que el cuerpo sea trasladado a autopsia a la Morgue Judicial.

Según reconstruyeron las autoridades de la Unidad Regional XII, el homicida se movilizaba en una motocicleta Honda negra de gran cilindrada, con patente brasileña y casco. Quedó registrado en algunas cámaras de la zona, pero los pesquisas harán un relevamiento más exhaustivo para tratar de reconstruir lo más que se pueda su recorrido.

Los testimonios relevados son coincidentes al expresar que se trataba de un hombre robusto, de unos 1,80 metros. “Yo estaba lavando mi auto acá y el tipo subió con la motocicleta, como que no hizo nada, pero le clavó cinco tiros en el pecho a Chany. Paró la moto, el Chany estaba recostado sobre la camioneta, y ‘pum, pum, pum’. Cinco tiros. Subió a la moto y salió despacito como si nada”, fue uno de los audios que rápidamente se hicieron virales en la víspera.

Sobre el arma utilizada, en la escena se logró incautar un trozo de plomo que se corresponde con un revólver de grueso calibre, posiblemente un 38. Al respecto, la extracción de los proyectiles en la operación de autopsia podría confirmar o descartar esta hipótesis trazada por los efectivos de Criminalística.

En la jornada de ayer, apenas unas horas después del crimen, efectivos de la comisaría local y la Brigada de Investigaciones pusieron tras las rejas a un sospechoso. Fue identificado por las fuentes como Víctor F. (30), quien tiene antecedentes.

La detención del implicado, que es de Bernardo de Irigoyen, se concretó luego del relevamiento de testimonios de personas que estaban en la escena o cerca al momento del hecho.

Si bien la identidad del declarante se mantiene en reserva para no entorpecer el avance de las pesquisas (y para preservar su integridad), el testigo habría expresado haber reconocido al asesino cuando éste giró la cabeza, pese a que se movilizaba con casco.

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Las autoridades judiciales ordenaron que el hombre sea alojado en una celda en calidad de incomunicado por 24 horas, lapso en el cual se podría avanzar con varios elementos de prueba. La primera medida ordenada es una prueba de parafina para saber si manipuló un arma, pero también allanamiento en su vivienda y el vehículo en el cual se movilizaba, un Volkswagen Voyage.

Sobre las hipótesis y el trasfondo del hecho, los investigadores anoche eran cautos y esperan nuevos informes sobre el perfil de la víctima, aunque los antecedentes en la localidad hacen pensar sobre la posibilidad de que se trata de un ajuste de cuentas relacionado a los negocios ilegales de la frontera, como el contrabando de vinos y otras mercaderías.

Esto, está claro, deberá traducirse en elementos contundentes al expediente, aunque los pesquisas saben que a la hora de relevamiento de testimonios es muy difícil que alguien lo diga abiertamente.

Chany tenía como emprendimiento una cancha de fútbol, era un fanático de River Plate y aficionado a la caza furtiva, actividad por lo que tuvo conflictos con la ley. Algunos lo definieron como un peso pesado en la frontera, con un crecimiento y poder económico muy pronunciado, sobre todo con la adquisición de propiedades.

“Dios mío, por qué no me escuchaste que salgas de Irigoyen”, fue uno de los mensajes que se leyó ayer en redes sociales cuando se conoció la noticia de su muerte.

Estaba involucrado de modo directo en la organización de competencias de jeeps, siendo parte del Jeep Club Los Indomables, cuyos integrantes ayer pidieron el pronto esclarecimiento del hecho.

“Fue clave en la creación del cuerpo de bomberos voluntarios”, se dijo.

En cifras

En 16 meses se registraron tres asesinatos con sicarios en la localidad de Bernardo de Irigoyen. Dos fueron elaño pasado.

Fuente: El Territorio