"La inconsciencia de los conductores me genera dolor"

Graciela Soto Ortíz, presidenta de la Fundación Estrellas Amarillas, habló en Radio Sudamericana y se refirió a lo que realizarán el sábado 16 de noviembre, a 10 años del tremendo siniestro vial en el que fallecieron Alejandro Mauricio Cavalleri Casuzo (21), Rodrigo Scotto (20) y su hermana Zaira Scotto (17).

“Hoy estoy saliendo adelante con mi hijo que sobrevivió, me especialicé en educación vial y siempre me baso en una frase que dice ‘si fuera fácil, cualquiera lo haría’. La verdad es que me sostienen los perfeccionamientos que hice, trato de hacer todo lo que puedo, que alguien me escuche. No es un ruego, es una súplica lo mío”.

Graciela Soto Ortiz perdió a dos de sus hijos y el tercero, que también iba en el automóvil (Gerónimo Scotto) quedó con secuelas del accidente. “Gerónimo está con nosotros, vive conmigo y mi marido y todos los días es vivir el día”. “Yo siempre digo que en un siniestro vial tenemos dos consecuencias gravísimas e irreversibles, por un lado la muerte -que yo la conozco bien- y por otro lado que quede una persona con secuela y también conozco lo que es. A mí me tocó las dos consecuencias graves”.

Como integrante de la Fundación Estrellas Amarillas, Soto Ortiz dijo “hay una falta de consciencia de los conductores: por un lado me genera dolor porque no quisiera que nadie sepa nunca lo que es vivir con esto y por otro lado siento que me faltan el respeto”.

“Una vez que salgo de mi casa, de mi ámbito privado y coloco un pie en la vereda, yo ya estoy compartiendo el espacio público con todos los usuarios del espacio público y tienen el mismo derecho que yo.  Tenemos obligaciones también y lo que no queremos cumplir son las obligaciones”. “Cuando yo veo una motocicleta con 4 ocupantes y dos de ellos menores, yo miro y pienso que también me faltan del espeto porque se ponen en riesgo ellos y me ponen en riesgo a mí”, agregó.

SÁBADO 16 DE NOVIEMBRE

Graciela Soto Ortiz estará junto a su familia el sábado 16 de noviembre a las 6 de la mañana en la intersección de Av. Independencia y Castelli. Allí repintarán la estrella amarilla al cumplirse 10 años del fatal hecho.